El sacerdote José Guntern tomó amplia notoriedad luego de que revelara públicamente que, en su momento, envió una carta a Edgardo Gabriel Storni, relacionada con el trato del ex arzobispo de Santa Fe con un seminarista: “Esta no es una carta, sino una confidencia de amigo. Tuviste un serio desliz que afectó a un grupo en plena formación espiritual y humana. No te juzgo ni te condeno, no me corresponde. Sí te sugiero que reflexiones en Cristo y tomes conciencia de la gravedad de tus actos”, decía la misiva. Días después de conocerse la carta, Guntern fue citado a concurrir al Arzobispado santafesino y presionado para que se retractara públicamente del contenido del texto. En esta entrevista, uno de los involucrados, el sacerdote Mario Grassi se defiende de las acusaciones. Año 2002.